El 3 de octubre se celebra el “Día de la Unidad” en Alemania, aunque las diferencias políticas y económicas entre el este y el oeste persisten.
Por Matías Fidel Cacheiro.
Alemania celebra el aniversario de su reunificación. Fue el 3 de octubre de 1990: Una época de grandes transformaciones. El Canciller Olaf Scholz se ha referido a una revolución pacífica y ha elogiado la creatividad y valentía que quienes contribuyeron a la reunificación. Hoy, sin embargo, pasadas tres décadas la brecha económica se mantiene.
La brecha permanece pasadas tres décadas de la reunificación
Marco Wanderwitz, representante de los Estados Federados de Alemania del Este, asegura que la gente debería apreciar más los logros de la unidad.
“Fue un gran momento: significó por un lado librarse de la dictadura y por otro fue una transición hacia un pueblo unido. La reunificación fue un gran regalo. Acabó con la división del país y la gente pudo vivir de nuevo en un país común y en democracia”, señala Wanderwitz, defensor del pueblo de la antigua Alemania Oriental.
Una Alemania, dos realidades
En Alemania las diferencias económicas entre el este y el oeste perduran pese a los esfuerzos de integración y a los miles de millones invertidos en la parte oriental del país. La riqueza de las familias es más del doble en el oeste que en el este.
“Creo que en algunas áreas deprimidas, a pesar de los esfuerzos, no es factible a medio plazo alcanzar el nivel económico de la Alemania Occidental… simplemente porque hay regiones ricas y dinámicas como el Rin-Meno o Múnich que no existen dentro de los cinco nuevos Estados Federados de Alemania del Este. Son Estados que están menos densamente poblados y tienen una demografía más pobre, lo que significa que las condiciones son completamente diferentes”, prosigue Wanderwitz.
Alemania del Este, un terreno para la ultraderecha
En el ámbito político, las diferencias son también perceptibles. Los dos partidos en los extremos del espectro político, Alternativa para Alemania (AFD) y los poscomunistas de La Izquierda, obtienen mejores resultados en el este.
“Estoy casi seguro de que celebraremos el cuadragésimo aniversario de la reunificación. Y quizás entonces ya no tendrá sentido un representante de los Estados del este ante el Gobierno Federal, igual que tampoco hay un representante bávaro”, concluye Wanderwitz.
